El principal fuerte del hotel es sin duda la atención, que fue inmejorable. Siempre amables, siempre atentos, nos ayudaron mucho con recomendaciones. Un día incluso nos permitieron tomar el desayuno más temprano porque debíamos salir, pedimos tal vez cereal y nos llevaron el desayuno completo a las 6:30 am. Fueron los mejores, la verdad.
El hotel es básico, pero muy limpio y cómodo. Está bastante alejado del Centro, pero lo compensa con los atardeceres sobre el mar más bellos que verás. Ideal si se quiere escapar del bullicio y descansar. Sino, solo es cuestión de rentar un golf cart, una moto o incluso una bicicleta. Recomendadísimos.