El establecimiento habrá sido bueno hace varios años , ahora se encuentra ,algo abandonado, los jardines con cosas rotas y deterioradas que tendrían que tener un lugar donde guardarse, galpón por ejemplo. Los sillones para tomar sol llenos de telarañas, las mesitas rotas,los parasoles estropeados. La pileta,algunos días limpia y otros no,la habitación, cuando llegamos lleno de pelo el piso, el cual se mantuvo allí hasta que nos retiramos.
En el gimnasio,los aparatos estaban todos rotos y sucios un asco, no se podían usar..
En lo que se refiere al desayuno realmente paupérrimo, dos medialunas y dos tostaditas por personas, nada que ver con lo que muestran en internet, según ellos al ir fuera de temporada no correspondía ofrecer lo que publicaban en la página, esto fue queja de todos los huéspedes, un desastre.Estoy totalmente arrepentida de haber elegido este hotel, porque me sentí estafada, por ellos y la empresa al no aclararnos la diferencia por ir la última semana de marzo
rañas