La habitación es muy bonita, decorada con muy buen gusto, con todos los elementos necesarios, confortable y llena de detalles encantadores.
Su ubicación, a 20 minutos caminando del centro de Oporto es estupenda para no sentirse molesto por la cantidad de turistas que pululan por la ciudad, en realidad es bajar una calle y llegar al Puente de Luis I, donde ya se puede respirar el ambiente de la ribera del río, las bodegas, etc.
Muy recomendable, de hecho, si volvemos próximamente, trataremos de volver a alojarnos aquí.
Mención especial a Mariana, quien nos recibió y nos ayudó muchísimo, dándonos muy buenas indicaciones para conocer Oporto y Gaia.
Muchas gracias!